Las aplicaciones del Digital Workplace incentivan y facilitan las comunicaciones de forma lateral y vertical. Adicionalmente, las plataformas de colaboración y gestión de proyectos permiten la asignación de tareas y la supervisión del progreso en tiempo real.
Esto no solo puede aumentar la satisfacción y el compromiso de los empleados, sino que puede recortar e incluso eliminar los costos relacionados con hardware y mantenimiento de espacios físicos, entre otros.
El Digital Workplace permite a los empleados acceder a las herramientas y la información que necesitan de manera rápida y eficiente.
Todos estos beneficios pueden transformar positivamente la experiencia del empleado. Sin embargo, son medios para un fin en el gran esquema. Al fin y al cabo, los beneficios que provee el Digital Workplace son la fórmula secreta detrás de la Total Experience (TX).
El objetivo final de todo negocio es garantizar la mejor experiencia al cliente (CX). Sin embargo, primero hay que asegurar la mejor experiencia al empleado (EX). Nuevas herramientas digitales pueden ayudar a identificar indicadores claves de desempeño (KPI) que permitan mejorar la UX para usuarios externos y empleados.
Estar a la vanguardia de las últimas tendencias facilita la adopción de futuros avances. Esto otorga una ventaja frente a los negocios que no se están preparando para adoptar un Digital Workplace. Basta con recordar la pandemia.
La pandemia dejó en evidencia qué tan vulnerables son las compañías que no han dado los primeros pasos hacia la transformación digital. Deje que sus trabajadores trabajen en cualquier momento y lugar sin perder productividad.
El departamento de TI debe garantizar la adopción de la tecnología en todas las áreas de su compañía. Permita que otros sectores optimicen y automaticen sus operaciones por medio de estas aplicaciones.