Las empresas alrededor del mundo están adoptando varias estrategias para reducir los cuellos de botella, aumentar el rendimiento de la red y maximizar su ROI para mantenerse al tanto de sus infraestructuras híbridas cambiantes. Mientras que estas estrategias varían de organización a organización y dan sus propias ventajas, pueden complicar la forma en que se monitorean las infraestructuras de TI. Obtener una visibilidad operativa de la velocidad de transferencia de la red, el ancho de banda, la actividad del tráfico, la salud y el rendimiento de componentes individuales, junto con la red general es imperativo a la hora de diseñar una estrategia efectiva de monitoreo. Monitorear el ancho de banda de la red simplifica el proceso al permitir a los administradores de redes monitorear el uso del ancho de banda en la red, así como su rendimiento.

Retos del monitoreo del ancho de banda de la red

Comprender la cantidad y calidad de los datos que se mueven en una red, monitorear el rendimiento del ancho de banda de la red, detectar anomalías en el tráfico de red, planear los requisitos del ancho de banda de la red y evitar gastos excesivos son tareas críticas para cada administrador de redes. Pero intentar identificar una herramienta que monitoree fácil y eficientemente, y que gestione etas métricas es un reto en sí. Hay varias estrategias de que los administradores de TI y de redes pueden emplear para superar estos retos para una mejor gestión del ancho de banda de la red.